Crujen las alas de mi pensamientopor no querer saber lo que por ti siento
te olvidé en una tibia madrugada
te soñé bajo la luna y mi almohada
Se escuchan los latidos en el viento
y parpadea mi boca sin tu aliento
porque te amé en una noche callada
y cerré mi piel para no sentir nada
Rotas mis manos te escriben un verso
prisioneras eternas de un mudo deseo
fuiste placer a la sombra de un beso
entre las llamas de éste amor ciego
Yacen los sueños tras un cielo inmenso
donde nadie alcanza ni siquiera el tiempo
se apagará el poema a la sombra de un beso
aquél que te dí… Donde muere el silencio
ROSER
Olá amiga Roser. Muito bom o seu poema; grande inspiração. Na vida real, muitas vezes, somos prisioneiros de um pensamento, de um desejo de retorno, de uma situação maravilhosa vivida no passado, como por exemplo, uma noite de amor inesquecível, ou um beijo trocado com uma pessoa especial, isso são coisas que ficam gravadas na nossa memória sentimental e quando vem ao cérebro, gostariamos de revivê-las.
ResponderEliminarUm grande abraço.
Amigo Dilmar, pues estoy de acuerdo contigo, y a veces pienso, en la cantidad de momentos, recuerdos, sueños, vivencias, etc...que caben en ésa cajita indispensable , que es nuestro corazón.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu infaltable visita a mi blog.
Un abrazo